Presentación

Amantes de mundos fantásticos, bisoños aventureros en busca de tesoros, criaturas de la noche, princesas estudiantiles y fanáticos de cachas de postín, ¡sed bienvenidos!. Invitados quedáis a rebuscar en nuestra colección de VHS, acomodar vuestras posaderas en una mullida butaca, darle al play, y disfrutar de lo bueno, lo malo y lo peor que dieron estas décadas.

ADVERTENCIA: Aquí no se escribe crítica cinematográfica (ni se pretende). Las reseñas son altamente subjetivas y el único objetivo es aprender y disfrutar del cine y, por supuesto, de vosotros.

Arma letal 2 ( 1989-Richard Donner) Lethal Weapon 2

Si en mi anterior publicación os hablaba de Arma Letal, en esta ocasión os hablo de su secuela, su pronta secuela, ya que se estrenó apenas dos años después de la anterior y donde nos vamos a encontrar un cocktail mejorado de lo que había sido la película precedente.

Sinopsis:
En esta ocasión Riggs (Mel Gibson) y Murtaugh (Danny Glover), deben luchar contra ciertos diplomáticos sudafricanos que en pleno apogeo del apartheid mueven grandes cantidades de dinero procedentes de negocios ilegales.


El cocktail:
De nuevo Richard Donner y Shane Black componen el dúo dinámico de la secuela, aunque diversos problemas con Warner Bros  hicieron que Black fuese substituido por Warren Murphy para reescribir parte del guión, cuyo nombre era en un principio Play Dirty y para la opinión de Black era el mejor guión que había escrito hasta la fecha.
El motivo del cese del guionista, radica en que esta secuela se supone que debería haber sido el final de la saga, con la muerte de Riggs al final de dicha película.
Lógicamente, para la productora, no había necesidad de finalizar la saga, ya que necesitaban que hubiese futuras secuelas y ya sabemos que en franquicialandia manda el dinero, con lo que el pobre Black tuvo que hacer las maletas.
Por suerte para la productora, la jugada les salió de cine, nunca mejor dicho, porque la película superó la recaudación de la primera película de la saga y fue nominada al Oscar  por los mejores efectos de sonido.
Las virtudes
Pues muchas, hay que reconocerlo, tiene muchas virtudes. La primera, es que hay que tener mérito para meterle caña al gobierno sudafricano en pleno apartheid y hacer que cuando la película se estrene en Sudáfrica, sea un bombazo en la taquilla de aquel país.
Después, el saber mejorar lo mostrado en lo anterior.
No se pillaron los dedos y arriesgaron jugando la baza de la química entre los dos protagonistas, añadiendo una relación amorosa a Gibson, encarnada en la belleza de Patsy Kensit (Rika Van Den Hass) que con tan sólo 21 años se comía la pantalla con su mirada y que tuvo una escena de sexo bastante explícita con Gibson, si bien para ambos fue difícil de hacer, puesto que ambos estaban casados y tenían fuertes convicciones católicas. Lamentablemente la pobre murió de manera muy trágica ( la imagen de Riggs luchando por salvarse de morir ahogado y cuando lo consigue y ve a su querida novia, es una escena treméndamente dramática).
Las escenas de acción, son incluso mejores que en la primera película, tanto en la apaertura, con ese tiroteo en medio de la ciudad y que acaba con...¡Un helicóptero!!! en medio de la ciudad rescatando a los delicuentes sudafricanos que llevan en el maletero un cargamento de monedas de oro.
Pero si hay una escena que a todos nos marcó y quizás es la más recordada por todos/as los/as aficionados a la saga, es sin duda aquella en la que Murtaugh queda atrapado en su baño, porque le han puesto una bomba en el WC. La escena es una locura, con un Riggs "haciendo el trabajo sucio, porque alguien lo tiene que hacer", mientras un Murtaugh le pide que cuando vaya a pedir ayuda que se entere la menos gente posible...y toda la casa se llena de bomberos, TEDAX, policías...lo del final con el wáter volando e impactando de nuevo en el coche de Murtaugh es un final made in Lethal Weapon.
Aunque no nos podemos olvidar de otra escena muy recordada como es aquella en la que Riggs y Mortaugh deciden tirar la casa de las columnas, construida en la ladera de una montaña, donde está la sede de los sudafricans y cuyo coste para darle más espectacularidad fue de quinientos mil dólares, más que nada porque la casa era una construcción real, no un simple decorado y hubo que volver a construirla tras la escena.
Y por último, creo que es un acierto meter al personaje de Leo Getz (Joe Pesci), ya que es un complemento cómico de la pareja protagonista y que de hecho funcionó también, que apreció en las dos secuelas posteriores a ésta.

Los defectos: 
Pocos, muy pocos, ya que de la saga, para mí esta es la mejor película de las cuatro. Quizás y sólo quizás, que las escenas cuerpo a cuerpo, no sean de lo mejor de la película, más bien son escasas y predominan más escenas con armas que no aquellas en las que Gibson pueda dar rienda suelta a su entrenamiento tan exhaustivo como el que tuvo que hacer en artes marciales para la película, dando muestras de él sólo al final con la pelea contra Derrick O´Connor.
Y luego el villano, Joss Ackland ( Arjen Rudd), es un actor de carácter, su mirada acojona, da el pego de rey ario supremo, pero aquí no se le aprovecha, aunque sus métodos sean fulminantes, quizás el verdadero villano sea Derrick O ´Connor, brazo ejecutor de Ackland y que con su estilo de oficial de la SS, es el que realmente se lleva el peso de la villanía en la película.

Valoración final:
Mucho mejor que la primera parte, más acción, pero hecha con cabeza, más humor, pero sin sobre pasarse y sobre todo más y mejor Arma Letal que al final es lo que importa.


Nota Ochenter: 9/10

No hay comentarios: