Presentación

Amantes de mundos fantásticos, bisoños aventureros en busca de tesoros, criaturas de la noche, princesas estudiantiles y fanáticos de cachas de postín, ¡sed bienvenidos!. Invitados quedáis a rebuscar en nuestra colección de VHS, acomodar vuestras posaderas en una mullida butaca, darle al play, y disfrutar de lo bueno, lo malo y lo peor que dieron estas décadas.

ADVERTENCIA: Aquí no se escribe crítica cinematográfica (ni se pretende). Las reseñas son altamente subjetivas y el único objetivo es aprender y disfrutar del cine y, por supuesto, de vosotros.

VIERNES 13 PARTE X JASON X, EL MAL CAMBIA DE ROSTRO (2001, JAMES ISAAC) FRIDAY THE 13TH PART X JASON X


VIERNES 13 PARTE X JASON X, EL MAL CAMBIA DE ROSTRO (2001, JAMES ISAAC) FRIDAY THE 13TH PART X JASON X


Queridos Ochenters, si semanas atrás comenté y valoré los continuos esfuerzos por dar un final digno a Freddy Krueger en su última cinta “La Nueva Pesadilla de Wes Craven” (lo consiguiera Craven o no) hoy vamos a ver un ejemplo de todo lo contrario. Un buen ejercicio de cine comercial haciendo uso y provecho de la fama del personaje, filmando todo un despropósito sin respeto hacia un villano tan importante en el género Slasher como es Jason Voorhees, así como hacia su madre Pamela Voorhees y a todas las víctimas que una vez ajustició el bueno de Jason.
Una mezcla de Slasher y Ciencia Ficción que no sentó nada bien al bueno de Voorhees ya que ni se respetó la estética del personaje ni su historia. Es motivo suficiente para que se considere la peor entrega, con diferencia, de toda la saga (y mira que era difícil); entrega que más bien parece tomarse a broma a sí misma, ridiculizando por completo el estilo que a tantos fans enamoró.

Hoy, por fin y para dar por finalizada la saga “Viernes 13” y para bien del asesino Jason Voorhees, vamos a hablar de “Jason X”, décima entrega del famoso psicópata de Crystal LakeComo siempre, a partir de aquí es inevitable hacer spoilers de la trama, aunque en este caso, casi lo considero haceros un favor…

La historia se centraría cronológicamente años después de “Freddy Vs Jason”, (aunque se estrenó antes que ésta) Estamos en el año 2008 donde Jason, por fin, ha sido capturado por el gobierno y condenado por un juez a la pena capital (imaginaos el juicio). El primer problema viene aquí, pues Jason no puede morir y no por falta de ganas y empeño de sus verdugos, pues probaron desde la silla eléctrica a pelotones de fusilamiento e incluso la horca.

Aceptada la resistencia del personaje a morir, deciden dar otro paso y dejarlo en cautiverio en una prisión cercana a Crystal Lake, prisión especialmente diseñada para Voorhees (no os esperéis mucho de esta prisión, pues lo tienen atado con cadenas y correas en una habitación a lo Hannibal Lecter en “El Silencio De Los Corderos”)


Bien, como decía y ante la imposibilidad de acabar con su vida deciden lo que es más normal en 2008, dejarlo en suspensión criogénica (a lo John Spartan), para que, en algún momento del futuro, logren dar con un método que sea capaz de ajusticiar al grandote y hacerle cumplir su pena capital.

El problema viene cuando el Coronel Wimmer, (interpretado por David Cronnenberg, sí, el mismo que dirigió “La Mosca” de Goldblum) acompañado de un grupo de soldados quiere llevarse a “el bicho” (literal) al centro de Scraptown para investigar su capacidad regenerativa del tejido dañado.


“Me llevo el bicho” – David Cronnenberg y su bicho.

Petición a la que se niega una de las protagonistas de esta cinta debido al riesgo que ello conllevaría si Jason escapara, la doctora Rowan LaFontaine, investigadora gubernamental y encargada de la futura criogenización de Voorhees.


Cuando Wimmer y sus hombres van a la “celda” de Jason, descubren que se ha escapado, (no preguntes cómo) y ha puesto a un trabajador del centro en su lugar que previamente lo había tapado con una manta por sentir terror ante la mirada de Jason (todo esto ocurre en menos de cinco minutos) y aquí entra en escena de nuevo nuestro querido Voorhees y empieza a matar como sólo él puede hacerlo, acaba con todos los soldados incluido Wimmer, que es ensartado como un trozo de carne de barbacoa.


Puntería nivel Jason Voorhees.

Rowan, ante tal escena, corre a la cámara criogénica huyendo del asesino de Crystal Lake para tenderle una trampa y criogenizarlo. Jason cae en la trampa y es encerrado en la cámara criogénica machete en mano (que tampoco se sabe cómo vuelve a reencontrarse con su machete, simplemente aparece en su mano)
Bien, el plan funciona a la perfección y Jason queda atrapado en la cámara iniciándose la secuencia de criogenización. Rowan se acerca para cerciorarse de que Voorhees está dentro y Jason, que vengativo es un rato, atraviesa la puerta de la cámara criogénica con su machete, hiriendo a Rowan y provocando el cierre hermético de la habitación haciendo que todo lo que hay en ella quede en estado de criogenia, incluida Rowan, que queda atrapada junto al psicópata… Todo esto en menos de diez minutos de metraje.

Los años pasan y el planeta Tierra, literalmente, muere. No se sabe por qué ni cuando, simplemente no hay vida en el planeta y por supuesto nadie en todo ese tiempo que aún había vida intentó rescatar a Rowan y traerla de la criogenia, simplemente se la abandona junto a Voorhees.

Pasada la época antigua y en un futuro distante, entra en escena un grupo de universitarios de la nueva época entre los que se encuentra un droide sexualizado llamado Kay-Em 14 (que es un droide pero necesita traje de protección) los cuales van protegidos por mercenarios del futuro autodenominados “Gorilas” los cuales encuentran la cámara de criogenia. Como es normal la abren encontrando dentro a Voorhees, y tras un rápido análisis visual del personaje y dándonos información sobre el fatídico destino del Hockey haciendo alusión a la máscara de Jason, el cual será declarado deporte ilegal en 2024 vete a saber por qué, siguen inspeccionando la sala y encuentran a Rowan, igualmente en estado de letargo, la cual puede ser descriogenizada con éxito, según el droide Kay-Em.

Y aquí se sucede una de las escenas estúpidas (sin perdón) de la cinta con uno de los personajes cómicos, Azrael (del estilo Jar Jar Binks) que la emprende a golpes con la cámara de criogenia ya abierta, pues se le ha quedado pegada a la mano una taza que estaba congelada. Ante los golpes, Jason se tambalea aún machete en mano y cae cercenándole el brazo a Azrael. Como podréis suponer, en este futuro lejano, pues estamos en 2455, esto es como el que se clava una astilla y, tras un adhesivo que funciona como contención de la herida y analgésicos contra el dolor, deciden volver a la Grendel, su nave espacial y llevar a ambos especímenes del pasado con ellos.


Azrael y su brazo

De vuelta en la Grendel y con todo dispuesto para empezar con el proceso de vuelta a la vida de Rowan, entra en escena el profesor Brandon Lowe, que se hace cargo de dirigir el trabajo de despertar a Rowan y encarga a tres de sus alumnos que hagan un análisis completo a Jason en un laboratorio anexo.
Para regenerar los cuerpos criogenizados (o cercenados como en el caso de Azrael y su brazo) depositan los cuerpos en una máquina que analiza cada tejido del cuerpo y lo recompone con nanotecnología y lo que ellos llaman “hormigas” que son una especie de gusanos digitales que se introducen en el cuerpo para reparar células dañadas. Inician el proceso.

Mientras traen a la vida a Rowan, los estudiantes del doctor empiezan con el escaneo del cuerpo congelado de Jason, pero vete a saber por qué, dos de los tres estudiantes al cargo no aguantan su pasión (deben ser las feromonas que desprende el cuerpo congelado de Jason) y deciden ir a otra habitación a dar rienda suelta a sus deseos carnales.


Mientras, en el laboratorio anexo, Rowan es descriogenizada con éxito y acepta rápidamente que han pasado más de cuatrocientos años desde su criogenia y que va en una nave espacial… Tras esto, el profesor Rowe se pone en contacto con Dieter Pérez, de la estación espacial Solaris para comunicar sus hallazgos y así poder vender los dos especímenes nuevos. Todo muy profesional. Ante estos descubrimientos, Dieter no muestra el más mínimo interés, pues en esta época ya hay mucha gente descriogenizada y no es nada nuevo.

Ante la desesperación del profesor por su necesidad de dinero, Dieter descubre que uno de los dos especímenes criogenizados es Voorhees, del cual conoce toda su historia y por el que sí pueden conseguir una fortuna.


“Nos ha tocado la gorda” – Profesor Brandon Rowe

Aquí se sucede otra de las escenas absurdas de la cinta, pues tras las negociaciones aparece una de las alumnas del profesor que lo reclama para juegos carnales sadomasoquistas con unas pinzas en mano (existen droides prácticamente humanos y máquinas que regeneran tejidos a la perfección pero se siguen usando los mismos juguetes sexuales de hace cuatrocientos años) y una botella de champán en la otra.


“Profesor, creo que ha llegado el momento de hablar de mi examen…”

Mientras, la única persona que parece tomarse en serio su trabajo, una de las alumnas más avanzadas del profesor, cotillea bajo la máscara de Jason para ver qué guarda su portador. Tras este momento mínimamente interesante, nos pasan a la siguiente escena.


“¡Aprobada!” – Profesor Brandon Rowe

Sí, es el profesor vestido con un picardías violeta al cual le están retorciendo los pezones con las pinzas para placer masoquista. Imaginaos las caras de los espectadores en el cine.

Pero no contentos con esto pasamos a la siguiente escena, donde vemos al “técnico” encargado del mantenimiento de Kay-Em colocándole pezones al droide, porque bien sabido es que los droides quieren tener pezones, pues los humanos los tienen…


Es cierto que una de las señas clásicas de la saga “Viernes 13” son sus continuas referencias a la sexualidad desinhibida adolescente, pero al menos, estaban dentro de un contexto moderadamente lógico; aquí pasamos a estar en una nave de exploración medianamente normal con estudiantes, soldados, robots y profesores que de buenas a primeras entran en un bucle de escenas sexuales sinsentido como si Jean-Baptiste Grenouille hubiese esparcido por el aire su última creación antes de ser ejecutado.

Ante tal desarrollo de lascivos acontecimientos, Jason (¡por fin!) no tiene más remedio que despertar para poner orden (pues ya sabéis cómo se pone cuando la gente disfruta de sus cuerpos) y empieza a hacer lo que mejor sabe, matar. Lo curioso de esta película es que estás deseando que Jason empiece a hacer su trabajo con tanto personaje mediocre suelto, te identificas más con Voorhees que con los pobres venidos del futuro. Bien, como decía Jason empieza a matar, y lo hace empezando por el único personaje “normal” que hay en toda la cinta, la única persona que rechaza los placeres de la carne y está trabajando, Adrienne Thomas, interpretado por Kristi Angus.


Si lo llego a saber…

Eso sí, por lo menos nos deja una de las mejores muertes de toda la cinta.


Tras esta muerte, Jason encuentra una sierra quirúrgica del futuro enorme, (que es su machete 2.0) y empieza a cercenar a cuanto se pone en su camino con alguna escena que parece sacada de Scooby Doo.
Cuando Rowan descubre que Jason va con ella a bordo, la intentan tranquilizar diciendo que está criogenizado, pero ante su insistencia en deshacerse del cuerpo, deciden ir a verlo (ya todos desahogados) y como era de esperar, Jason no está. Entran en alerta máxima y los “gorilas” (los mercenarios del futuro), empiezan a buscar por toda la Grendel a Voorhees.

Todos perecen a manos de Jason, y debo hacer mención a la “muerte” del sargento Brodski interpretado por Peter Mensah (300, Avatar…) pero no por su epicidad si por lo estúpido de su guion.


Era joven… Necesitaba el dinero – Peter Mensah tras Jason X

Os pongo en situación, Jason atraviesa a Brodski (Mensah) con una barra puntiaguda de metal y éste, un personaje fuerte y decidido, dice la siguiente frase:

-“Con sólo un pinchazo no vas a acabar con este perro viejo...”

Tras esta frase de macho alfa, Jason lo atraviesa con la sierra quirúrgica y dice lo siguiente:

-“Sí, ahora sí…”


Seguimos; a punto de llegar a la estación de investigación Solaris, Voorhees acaba con la vida de Lou, piloto de la Grendel lo que provoca que la nave choque con la estación, la cual explota… Así es, la Grendel sigue adelante (un poco afectada, menos mal) pero la Solaris explota… Para que os hagáis una idea, es como si lanzáis un petardo contra un cohete y el cohete explota quedando el petardo intacto. Tras esto, se suceden las típicas escenas de pánico y varias muestras de carencias de civismo de los tripulantes del futuro que se animan unos a otros a que asomen las cabezas por las puertas por si Jason está detrás de ellas. Ya habiendo acabado con la vida de todos los tripulantes de la Solaris tras el impacto (cosa que les viene a dar igual) deciden usar el transbordador de escape para salir de la Grendel, y nuevamente, se sucede una de las escenas más absurdas del cine Slasher/Ciencia Ficción. Tenemos a Kay-Em 14 y al técnico encargado de ella (el de los pezones) que le pide que analice las probabilidades de éxito de ir al transbordador a lo que responde el droide con un cálculo del 12%. El técnico enfadado le pregunta si no hay alguna posibilidad de mejorar las probabilidades y entonces, se besan... Creedme que todo esto sucede así. Como podréis imaginar todo sale mal y el transbordador termina explotando.

No puedo dejar de comentar la trama sin mencionar la escena más ridícula de toda la cinta, vuelvo a poneros en situación. Con el resto de tripulación acorralada por Jason y ante lo que parece una muerte segura de los personajes que quedan, entra en escena una remozada Kay-Em 14 envuelta en cuero pero que ahora es ninja y sabe Kung Fu, la cual propina una brutal paliza a Jason, que termina descuartizado a tiros.


“¿Quién es tu mamaíta?” – Kay-Em 14

Y dejan lo que queda de Jason en la máquina de regeneración (muy inteligente) la cual se cortocircuita y empieza a escanear el cuerpo, pero al ver que no hay suficiente materia orgánica cancela el proceso, pero no se sabe bien por qué, esta cancelación es denegada por la propia máquina que busca un sucedáneo celular sintético por la habitación para regenerar a Jason dando el siguiente resultado.


Como podréis imaginar, esta aberración de Jason, conocido como Uber-Jason o Jason modificado, fue con mucho, lo que más indigno a los fans de la saga. Un Voorhees robotizado más semejante a RoboCop de Verhoeven que al villano que todos conocíamos.

Quiero que entendáis el nivel de cutrez del que hace gala todo el metraje y de cómo se va superando para mal y alimenta la desesperanza del espectador que busca comprender qué está ocurriendo. Empeñada en acabar con Jason Voorhees, New Line Cinema apostó por una idea que ya sonaba mal en el papel y que terminó siendo peor en movimiento.

El infame guion fue escrito por Todd Farmer (“San Valentín Sangriento 3D”) y dirigido por Jim Isaac (“The Horror Show”, “Hombre Lobo”…) contando con un presupuesto inicial de once millones de dólares y con una recaudación en taquilla de diecisiete millones.


Hago lo que quiero… con mi Jason – Todd Farmer.

Su BSO fue nuevamente dirigida por Harry Manfredini, habitual de toda la saga, dando como resultado una BSO más cercana al telefilm que a una producción de cine, os dejo su tema principal.


Para ir terminando y como siempre, os dejaré algunas curiosidades de la cinta para quitaros un poco del mal sabor de boca.

-El nombre del personaje de Adrienne, es en realidad un homenaje a Adrienne King, actriz principal de “Viernes 13


-El guionista Todd Farmer dijo que se inspiró en “Alien, El Octavo Pasajero” para preparar el guion de “Jason X


-“Jaxon X” es la película de la saga “Viernes 13” con el mayor número de muertos: veintiocho en total


-La versión americana de “Jason X” sufrió algunos cortes para pasar la clasificación para menores de dieciséis años. La versión de la película exhibida en los demás países no sufrió ningún corte.


-A pesar del desastre en taquilla y en crítica, salió a la venta numeroso merchandising, pues iba a vender igual, de la película, como figuras basadas en la nueva versión de Jason Voorhees


O la nueva máscara metalizada


En definitiva y para dar por finiquitada la saga “Viernes 13”, esta cinta no será recordada como algo a tener en cuenta dentro de la franquicia, aunque sí como ejemplo a evitar. Sin salvación alguna, Jason Voorhees terminó siendo una caricatura futurista de lo que algún día fue gracias a New Line Cinema que buscaba beneficios a cualquier precio. Por lo menos, siempre podréis revisitar las primeras partes de la saga y volver al campamento Crystal Lake para disfrutar de las matanzas que otrora nos hacían saltar del sillón ante un incombustible y maltratado Jason Voorhees.

Me despido queridos Ochenters con el sabor agridulce que esta décima película me dejó en su primer visionado y me ha vuelto a dejar durante este escrito, esperando que, al menos, os haya resultado entretenida la lectura.
Hasta el próximo artículo amigos.




3 comentarios:

Han Solo dijo...

A mi es de las pelis de Vienes 13, que mas me gustan

Han Solo dijo...

Es de los episodios de Viernes 13, que mas me gustan

Mr Doc Hogan dijo...

Tiene otro estilo diferente y también sus defensores. Es cierto que depende de cuándo y cómo se viera la primera vez para tenerla en buena o mala estima... No es lo mismo verla en nuestra impresionabilidad prepúber que después. Gracias por tu comentario 😉